martes, 5 de febrero de 2013

EL FUEGO EN NUESTRAS CASAS

Nos gusta que nuestros viajeros disfruten de la chimenea en invierno y del embrujo que supone tener las chimeneas encendidas cuando el frío castellano campa a sus anchas. En nuestras casas el viajero tiene a su disposición toda la leña que necesite (incluida en el precio), piñas y pastillas de barbacoa que facilitan el encendido. Siempre pedimos que cuiden del fuego, especialmente en el momento de irse a la cama. El fuego, y los aparatos eléctrico son fuente de incendios en muchos casos por no tomar las debidas precauciones. Evitar tener encendida la chimenea o retirar las brasas a un cubo metálico y sacarlas de las casas al patio o al cortafríos, evita que las bajas presiones produzcan malas combustiones y que el humo pueda inundar la casa, especialmente cuando estamos en el descanso nocturno. Prudencia es la mejor recomendación para usar el fuego.